El turismo son personas: experiencias en Granada en el blogtrip #grxperience
Hace tiempo que no escribía en mi blog de una forma personal pero esta ocasión lo merece tras las experiencias en Granada que hemos vivido en el blogtrip #grxperience donde fui invitado por el Patronato Provincial de Turismo.
Una de las máximas de este blogtrip era “Desgranando Granada a través de las personas”, con un objetivo muy concreto más allá de impactos en Twitter y demás estadísticas frías: disfrutar del destino turístico de la provincia de Granada para mostrar que es mucho más que el icono conocido por todos.
La palabra Granada arroja 242 millones de resultados en Google, difícil poder destacar con estas cifras, pero si ponemos el foco en las personas todo cambia, no hay ninguna igual. Esto es lo que ha sucedido en este blogtrip, las personas han tomado el protagonismo y, frente a los recursos del territorio de la provincia de Granada, sobresalen las personas que nos los han mostrado, de forma que ésta se han convertido en el nexo de unión entre el turista y el destino: las personas como conectores, como vías de comunicación.
Por tanto esta reflexión nos lleva a dar un paso más en lo que me gusta denominar “geoposicionamiento emocional”, cuando las personas estamos en un lugar y emitimos información sobre el mismo lleva incorporada un elemento subjetivo y emocional, por tanto no existe un recurso o un destino sino la forma que tenemos de observarlo y disfrutarlo, que determina a su vez la forma en que tenemos de comunicarlo aportando nuestra particularidad y visión personal.
En un mundo repleto de datos, infoxicado (intoxicados de información), donde se habla de la economía de la atención como la única forma de destacar, con la aparición del Big Data casi como un nuevo paradigma y las Smart Cities nos hablan de ciudades inteligentes, donde la tecnología lo invade todo y llega el Internet de las cosas, es este mundo futurista y distópico hay que reivindicar más que nunca el poder de las personas, una visión antropocéntrica del territorio, somos el centro no porque seamos mejores sino porque nuestra visión determina la realidad (si, lo sé, ya lo ha dicho la física cuántica y las filosofías orientales hace muchos años).
La tecnología no es más que una herramienta y el territorio no es más que el espacio donde nos movemos, una coordenada unida a la temporal que nos permite contextualizarnos en el tiempo y en el espacio. Por tanto la clave del desarrollo y la promoción de un destino turístico no está en que llegue la señal wifi a nuestro móvil sino que llegue la esencia de ese sitio a nuestro corazón.
A partir de aquí publicaré dos post más conformando una especie de trilogía de mis experiencias en Granada: una descripción de mi viaje a través de las personas que nos lo han mostrado denominada “El turismo son experiencias” y una descripción de mis compañeros de viaje “El turismo es un viaje compartido”. De esta forma podremos decir que un viaje es igual a personas más experiencias.